10 PREGUNTAS A MATOS

Nombre: ANTONIO MATOS PINILLA

1.- Mis inicios en el fútbol y en el C. P. Oliva se remontan al año 1972 y jugué en el club hasta el año 1992. Empecé en juveniles y aún siendo juvenil pase a jugar en el equipo grande.

2.- Recuerdo con especial cariño mis dos primeros partidos, (con 16 años), fueron contra el Monesterio y el Burguillos, los dos partido se jugaron en casa y los dos los ganamos. El club contaba con dos porteros muy buenos, Piedad (que estaba expulsado) y Rogelio (lesionado); siendo el entrenador Antonio López (Canuto). Después seguiría jugando con los juveniles hasta final de temporada. En la siguiente temporada pasé al equipo grande y jugué todos los partidos, menos el primero contra el Jerez que perdimos 2-1.
Estos dos encuentros fueron el inicio de una trayectoria de 20 años en el C. P. Oliva.

3.- Las diferencias entre aquellos años que jugué al fútbol y el tiempo actual son enormes. La falta o precariedad de instalaciones era algo normal. Los campos eran de tierra-tierra (podías sembrar patatas en muchos de ellos), posteriormente se empezaron a ver campos con arena o lama y albero. Los vestuarios muy cutres, hechos de bloques, con dos duchas de agua fría (un bidón en el tejado de los vestuarios y cuando se terminaba te quedabas sin duchar o con el jabón en el cuerpo) y muy pocas perchas o banquetas para sentarse. El material deportivo era muy escaso, contabas con un par de balones para entrenar y uno o dos reservados para los partidos y para de contar, en cuanto a vestimenta tres cuarto de los mismo, el chándal no se conocía (por lo menos en los pueblos). El primer chándal que tuve (sudadera cerrada y pantalón) me lo regaló el amigo Luis Lima (había estado estudiando en Sevilla), con el entrenaba y los raspones eran menores. Gracias Luis, un abrazo. Las botas, que contaros, teníamos una para varias temporadas, había que remendarlas una y otra vez, algunas de ellas eran hechas por los zapateros locales y eran de cuero autentico (al igual que los balones) y se les daba tocino añejo para que fuesen más flexibles y durasen más.
Hoy ya sabemos, campos de césped, vestuarios con agua caliente y bien equipados; varias botas, de marcas caras, en una temporada y no digamos en camisetas y balones... Otro mundo. Así y todo, era más fácil jugar, solo tenías el fútbol y los juegos de la calle, los bolindres, el salto la mula, etc... Hoy los videojuegos, el ordenador, el botellón... hace que los jóvenes a pesar de las facilidades tengan más complicado elegir.

4.- Recuerdo muchos partidos, pero especialmente son gratos mis dos primeros partidos con el C. P. Oliva, los dos ascensos conseguidos, el Subcampeonato del Trofeo Bodas de plata de la Federación Extremeña de Fútbol, donde a igualdad de puntos con el campeón (el Campanario) la diferencia de un gol más en contra, nos relegó al subcampeonato, tras 23 partidos consecutivos sin conocer la derrota entre la liga y la copa.

5.- En 20 años jugando al fútbol he tenido muchos compañeros y he de reconocer que a la gran mayoría los recuerdo con cariño, (hubo compañeros con los que compartí muy pocos partidos) y como grandes personas que siempre me apoyaron deportivamente. Igual que a los aficionados que siguieron los comienzos del C.P. Oliva me viene al recuerdo LUIS, MENDEZ., PARRA, BOLAÑOS, CARMONA, LOPEZ, ANICETO, KV y un largo etc. del equipo que procedía de Badajoz, pero no menos importantes, tanto en lo deportivo como en lo afectivo, han sido los jugadores salidos de la cantera como: CANO (muchos años ejerciendo de maestro de ceremonias cuando practicábamos el fuera de juego y además nos salía como a nadie), MANOLO RAMIRO (PEROLE con su tranquilidad y saber estar, lo mismo te salvaba un gol en nuestra portería, que te marcaba en la contraria), BRAVO (con su incansable subir y bajar por el lateral), PEREZ RASTROJO (con su enorme zancada y su rapidez, me encantaba enviarle las pelotas en largo en los saques de portería, cuando sacaba bien, que eso es otra historia y Manolo se plantaba solo delante del portero), LOPEZ (la técnica y la anarquía unidas en un jugador), RAFAEL (La Lapa, se pegaba como un sello y aburría a cualquiera), LOS HERMANOS RAMON Y SANTI, A. CABALLO (jugador y entrador, con él comencé a volar), RAMON BARROSO (Panzu para nosotros, con su perfección y su táctica, como jugador y entrenador), PLACI, LEON, FERNANDO, PERGUI, MARIANO, J.MARI, PACO PELAYO, J. CARLOS, ROGELIO, LOS HERMANOS TEO, MIGUEL, PEÑA o JESÚS (con muchos años como jugador en activo, con una zurda de terciopelo y un driblin diabólico, con un ascenso a Preferente como entrenador-jugador y varios años más como entrenador; puso su broche de oro en el fútbol como concejal de deportes , siendo el promotor y motor, (reconociendo los méritos de todas aquellas personas que le apoyaron y le animaron), por su empeño y desvelo, del campo de césped que actualmente disfrutamos. Después de más de 35 años en competición oficial, el C.P. Oliva, tiene un campo digno de su historia y del deseo de tantos futboleros. Solo espero que siga siendo mimado y cuidado para que las nuevas generaciones de canteranos puedan disfrutar de él y puedan formar parte del equipo grande del C.P Oliva. ¿Será posible? Es una incógnita que el tiempo despejará.
Como la memoria es muy frágil y quebradiza, en todos los ámbitos de la vida, un larguísimo etc. etc. Pues son tantos los que me dejo en el tintero, que espero no se moleste ninguno.

6.- Durante los años que he estado jugando al fútbol, tengo que reconocer que todo ha girado en torno a esa práctica del fútbol, a pesar de los desengaños que te llevas, no me arrepiento de esta circunstancia. Jugando al fútbol he ido creciendo tanto deportivamente como persona, en un ambiente sano y de gran compañerismo. Me he sentido bien y he disfrutado con un deporte, al que le di todo lo que podía dar, pero me fue devuelto con intereses.
Por supuesto que supuso un sacrificio, entrenamientos, partidos, viajes, etc. La familia y amigos un tanto abandonados, pero para mí, mereció la pena. Mi compromiso con el C.P. Oliva era total, como muestra, recuerdo como en el bautizo de mis hijos (Luismi y Sergio dos canteranos del C.P. Oliva, Porteros ambos) y en la comunión de Luismi dejé a los invitados en la comida y me fui a jugar el correspondiente partido. En otra ocasión me fui a pasar el fin de año, a Piedrabuena (Ciudad Real), con mi hermana Mera y cuando llevaba un día allí me llamaron desde el pueblo: Matos que no tenemos portero y jugamos el día 30, te tienes que venir; os podéis imaginar. El día 30 estaba en Alburquerque jugando al fútbol y el que lo dude que le pregunte a Emilio Rincón.
Por todas estas circunstancias, tengo que agradecerle a mi familia, especialmente a Mari Carmen por todo lo aguantado y por el apoyo que siempre me brindó. Son muchos los sacrificios realizados. Gracias.
Me siento orgulloso de todo lo dado al fútbol y al C.P. Oliva.
7.- Mi mejor recuerdo, sobre todo por lo que supuso para el club, los dos ascensos a preferente y mi peor momento el descenso que me tocó vivir y las lesiones de algunos compañeros.

8.- Después de retirarme del fútbol no he desempeñado ninguna función dentro del club. He sido un seguidor más, sobre todo apoyando a mis hijos en sus respectivos equipos.

9.-A lo largo de 20 años jugando al fútbol en el Oliva han pasado muchas personas por el club que han sido importantes para mí, por su relación conmigo y por su labor para el C.P. Oliva.
Quizás por la confianza depositada en mi, Evaristo Pimienta ha sido una pieza clave en mi trayectoria y en su persona quiero agradecer a todos los directivos que han colaborado en esta larga travesía y D. Basilio por todo lo que ha significado, no solo para mí, para el C.P. Oliva y el deporte en general en Oliva.
También han sido muy importantes mis compañeros como anteriormente he citado y mis entrenadores entre los que se encuentran D. Alonso, A. Caballo, Canuto, Pérez Lozano, Pedro, Pablo, Paco Ramos, Ramón, Jesús y Maxi (espero no haber dejado ninguno olvidado).
Pero también merecen su reconocimiento personas como Zacarías, el maestro Perera, Maico, Puchades que se desvivían porque todo estuviera perfecto, como ahora ocurre con el Sr. José “El Míster”.
Y no podemos olvidar a la afición, siempre apoyando.

10.- Como anécdotas recuerdo el trofeo Iván de Vargas en el que tras terminar el partido 2-2 se decidió lanzar una tanda de penaltis, después de parar 3 penaltis, se saltaron al campo a pegarnos y tuvimos que salir corriendo. O cuando se quedo el coche sin gasolina viniendo de jugar un partido y tuvimos que sacar la gasolina de otro coche con una goma ya que cerca no había ninguna gasolinera. También recuerdo que tras parar un disparo a puerta recibí un fuerte golpe en el estomago… después de varios minutos recuperándome del percance, el árbitro me dice: “Déjate colar alguno que ten van a matar”.
Sé que no están todos los que son parte de esta historia, quizás entonces se convirtiera en la historia interminable, por eso quiero disculparme por no citarles, pero no me olvido de ellos.

Así lo he vivido, así lo he sentido, así lo he contado.